El diseño gráfico como actividad proyectual es una disciplina que, en las últimas décadas ha alcanzado niveles de depuración técnica, tecnológica y conceptual que han potenciado su repercusión y pertinencia en la sociedad. A partir de esto, la labor del diseñador gráfico se ha dignificado y alcanzado nuevos niveles de reconocimiento y remuneración en su contexto de acción; esto a su vez, promueve la difusión y diversificación de sus alcances productivos en el ámbito social, cultural y económico.
El diseñador gráfico encuentra en los nuevos modelos económicos de configuración social, una coyuntura idónea para desplegar todo su quehacer profesional; poniéndolo al servicio de las empresas y clientes; quienes buscan posicionar sus ideas de negocio a través de estrategias de mercadeo y publicidad. El capitalismo como sistema social y económico imperante en gran parte de la sociedad mundial, ha generado fenómenos de consumo masivo que, necesitan ser satisfechos a través de la relación de oferta y demanda de productos y servicios; es precisamente en este contexto, que el diseñador gráfico se apropia de las necesidades del contexto y les brinda soluciones eficaces para promover las dinámicas de un mundo cada vez más competitivo.
Dado el crecimiento veloz y masivo en el intercambio de información, la demanda de diseñadores gráficos va en aumento, particularmente por del desarrollo de nuevas tecnologías y de la necesidad de prestar atención a los factores humanos que escapan a la competencia de los ingenieros que las desarrollan.
Algunas clasificaciones difundidas del diseño gráfico son: el diseño gráfico publicitario, el diseño editorial, el diseño de identidad corporativa, el diseño web, el diseño de envase, el diseño tipográfico, diseño de carteles, la señalética y el llamado diseño multimedia, entre otros.
Al programa de diseño gráfico de UNIBAC ingresan jóvenes con expectativas de formación que aspiran ser competentes en el ámbito laboral a nivel local, regional, nacional e, incluso internacional. El diseño gráfico al ser una disciplina descentralizada en sus dinámicas de ejecución de proyectos y encargos, permite un amplísimo abanico de posibilidades laborales tanto de manera presencial como remota.
Es fundamental para nuestro programa poder ofrecer y desarrollar procesos de formación e inserción en el mundo laboral para lograr posicionar diseñadores gráficos que cumplan con las expectativas del mundo actual; que sean capaces de definir derroteros exitosos en su profesión, que sepan gestionar procesos creativos y sean partícipes en proyectos creativos de toda índole.
El programa de diseño gráfico se inserta en una sociedad en la que la democratización tecnológica y los nuevos recursos y sustratos digitales al servicio de los mass media han generado que el sector productivo se interese en aquellos profesionales capacitados para la gestión de la comunicación visual y multimedia.
Todas estas transformaciones científico-tecnológicas han favorecido nuevas formas de configuración de lo económico y las dinámicas laborales tradicionales, lo cual ha permitido a su vez, una borradura de fronteras entre el trabajo presencial y el trabajo a distancia, lo cual ha proliferado una gran demanda de diseñadores gráficos y comunicadores visuales en general.
Un diseñador gráfico es un profesional de la comunicación visual capacitado para ofrecer soluciones eficaces a todo tipo de encargos relacionados a la imagen como sustrato para la comunicación. Dentro del amplio abanico de utilidades de la imagen al servicio de la comunicación visual se encuentran posibilidades de integración con los medios impresos, las pantallas digitales, el entorno audiovisual, la multimedia y el diseño interactivo.
Nuestro programa de diseño gráfico busca proyectar profesionales integrales con visión prospectiva que sean capaces de identificar, analizar, investigar, fundamentar, contextualizar, expresar y proyectar ideas que den soluciones eficaces a necesidades en el ámbito de la comunicación visual y multimedia de su entorno; involucrando procesos metodológicos y haciendo uso de recursos tecnológicos. Todo esto, lo realizará teniendo en cuenta principios éticos, liderazgo, emprendimiento y participación colectiva, que le permitan un ejercicio profesional interdisciplinar con repercusión social y cultural, enriquecido por competencias para la organización, apropiación, gestión, innovación, conceptualización y argumentación de proyectos de diseño.